El Recuento De Los Daños. La Nueva Realidad Post COVID 19

16 Jun El Recuento De Los Daños. La Nueva Realidad Post COVID 19

Ante la nueva realidad que nos enfrenta el Covid19 con sus consecuencias adversas en el sector de salud y económico, hemos observado diferentes formas y actitudes como las personas y las empresas están enfrentando este fenómeno: unos con pasividad e incertidumbre total que inclusive raya en la incredulidad, otros reaccionando evaluando en primer momento los perjuicios y daños que ha producido esta situación que ciertamente no es pasajera, y otros menos rediseñando sus modelos de negocio, para aprovechar las oportunidades que existen en la transformación digital y el comercio electrónico.

Para comenzar explicaremos la siguiente gráfica que refleja los momentos de disrupción:

Etapa de preparación

Todos los organismos y sistemas pueden ser alterados por un cambio radical interno o externo que afectan significativamente el desempeño habitual, al grado de perder la prevalencia o posición en su desempeño a nivel político, económico o social. Para el caso que nos ocupa nos referimos al desempeño empresarial. La oportunidad de anticiparnos y prepararnos antes de que llegue el momento disruptivo será vital disponer de los recursos tecnológicos, materiales, humanos y financieros para hacer frente en lo mejor posible y participar en la batalla con mayor probabilidad de éxito.

En la medida que nos preparemos mejor, menor tiempo nos llevará la recuperación y regresar a los niveles previos del Covid 19, por ello es muy importante armonizar las políticas financieras y operativas con los escenarios de corto, mediano y largo alcance.

Las empresas que son unidades económicas buscan para su supervivencia la generación de utilidades para mantener su operación sostenible debiendo tener una solvencia suficiente para cubrir sus gastos y costos de operación, por ello deben obtener recursos económicos constantes, que de no lograrlo estarían en peligro de desaparecer, es decir declarar su quiebra o insolvencia económica. Para ello recomendamos en este caso la siguiente guía que orienta sobre las decisiones primordiales que la dirección debe tomar:

Solvencia y liquidez

1. ¿Los saldos de cuenta en caja o bancos son suficientes para cubrir las obligaciones por 6, 8 ó 12 meses ?
2. ¿Contamos con líneas de crédito accesibles y revolventes para soportar la operación del negocio?
3. ¿Se ha comprobado la existencia de los saldos de cuentas por cobrar verificando con los clientes su capacidad de pago?
4. ¿Los inventarios de materia prima, para cuantos meses alcanza para soportar órdenes de producción?
5. ¿Los inventarios de producto terminado son realizables confirmando los pedidos con sus clientes?

Obligaciones a corto plazo

1. ¿Ya iniciaron la renegociación de pagos con proveedores, acreedores, prestadores de servicios y con los trabajadores?
2. ¿Se puede acelerar las amortizaciones y depreciaciones de equipo e instalaciones?
3. ¿Los accionistas mantienen su interés y compromiso de nuevas aportaciones a
   capital?

Mercado y Logística

1. ¿Ya implementaron el comercio electrónico con plataformas digitales para promover y
   vender sus productos y servicios?
2. ¿Ya se establecieron nuevos acuerdos comerciales con sus clientes actuales?
3. ¿Ya establecieron convenios de colaboración con sus competidores para compartir recursos, materiales, tecnológicos humanos y logísticos?

Capital Humano y Organización

1. ¿Ya identificó las personas esenciales en términos de talento y competencias para resolver problemas?
2. ¿Ya identificó y mapeó los nuevos procesos de negocios para su automatización vinculados con el comercio electrónico?
3. Con base en lo anterior, ¿ya redimensionó su organización asegurando su correcta alineación con los nuevos procesos?
4. ¿Ya tiene definidos los nuevos objetivos, metas e indicadores clave de desempeño? (kpi’s)
5. ¿Ya promovió la nueva cultura de salud y protección a los clientes, empleados y proveedores, estableciendo el protocolo de salubridad?
6. ¿Ya estableció las bases de colaboración, solidaridad, compromiso e innovación?

Podemos concluir que el reto en esta nueva “realidad” es recuperarnos en el menor tiempo posible, con ánimo y convicción, fortaleciendo nuestros procesos operativos con tecnologías digitales y simultáneamente repensar un nuevo modelo de negocio con un enfoque integral, equilibrando los compromisos sociales, económicos y ambientales.